LA CULTURA LA HACEMOS TODOS
Apropósito de la Feria del Libro de Bogotá
Carolina Pedroza Ruiz*
videoscriptum@gmail.com
Mayo, 2107
La trigésima edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá realizada entre el 25 de abril y el 8 de mayo en Corferias, tuvo a Francia como invitado principal en el marco de la conmemoración del “Año Colombia-Francia 2017”; de entre todos los ilustres invitados resalta la participación de dos nobeles de literatura, Vidiadhar Surajprasad Naipaul de Trinidad y Tobago autor de “Semillas Mágicas”, galardonado en 2001, y John Maxwell Coetzee escritor de “La Edad de Hierro”, sudafricano ganador del premio en 2003; además la Feria sirvió de escenario para el 23 Festival Internacional de Poesía de Bogotá. Así que fue toda una fiesta literaria.
Se debe resaltar que Bogotá ha tenido una relación íntima con los libros y la literatura, no sólo por el recurrente movimiento de escritores nacionales en la Capital, sino por los eventos realizados en culto a los libros.
En octubre de 1936, siendo Jorge Eliécer Gaitán alcalde de Bogotá, se celebró la Feria Popular del Libro teniendo como sede el Claustro de Santo Domingo, el Pasaje Rufino Cuervo, algunas estaciones de Ferrocarril, y recorridos de bibliotecas ambulantes por barrios de la ciudad. Durante la Feria, paralelo a la compra y venta de libros, se efectuaron conferencias y charlas relativas al valor de la lectura. Gracias a la concurrencia a la Feria esta continuó realizándose durante varios años e inspiró la organización de Ferias Nacionales del Libro.
Otra experiencia importante fue la Feria del Libro del Parque Santander, evento organizado por la Cámara Colombiana del Libro, desde la década de los sesenta con una duración de varias semanas, pero sin guardar periodicidad. En la actualidad la Feria continúa realizándose preferiblemente a final de año.
En lo referente a la Feria Internacional del Libro de Bogotá, su primera versión se realizó el 29 de abril de 1988 como parte de las celebraciones de los 450 años de la fundación de Bogotá, en esa ocasión asistieron aproximadamente trecientas mil personas, cifra bastante exitosa si se tiene en cuenta que en la Capital habitaban poco menos de cinco millones de personas. En la última versión realizada en 23 pabellones del complejo de Corferias durante 15 días, participaron cerca de 500 expositores, con más de 150.000 títulos, contando con cerca de 500.000 visitantes.
Al comparar las cifras de concurrencia entre la primera y última versión, teniendo presente el incremento poblacional de la ciudad, se puede notar una menor asistencia porcentual por parte de la ciudadanía, situación corroborada por los cálculos de baja lecturabilidad de los colombianos, 2 libros al año.
El presente escenario invita a la reflexión, pues innegablemente el desarrollo de la sociedad se sustenta en el culto a la palabra, culto que realizamos de forma privada y personalizada a través del encuentro con los autores través de su obra, preferiblemente a través del libro. En este sentido, las opciones que se presentan para niños y jóvenes buscan fortalecer el gusto por la lectura implementando campañas de aplicación diaria en las instituciones educativas, los concursos y los incentivos, las bibliotecas de acceso gratuito, y muchas más, parecieran ser iniciativas suficientes para lograr su cometido.
Además de un asunto de idiosincrasia que requiere un análisis profundo, se hace pertinente la implementación de una multiplicidad de campañas, no sólo para los niños y jóvenes, sino que incluya a los padres. Didácticas como leer una misma novela corta al mes o un cuento cada quincena y luego representarla en familia o amigos como narración oral o una apuesta en escena develan aptitudes que sobrepasan la lectura.
Menores niveles de lectura se traducen en problemas sociales relativos a la construcción de oportunidades, cohesión social y convivencia ciudadana, la lectura trasciende la erudición, pues permea elementos idiosincráticos de la sociedad bogotana, siendo competencia y responsabilidad de todos los habitantes e instituciones de la Capital. Independientemente de cuál sea la manera que se escoja para alimentar la mente y el espíritu, la invitación es a la movilización en pro del culto al libro y la lectura, porque la cultura somos todos.
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* Artista escénica bogotana, con estudios en Dirección y Producción de Cine y Televisión, especializada en escritura, redacción y corrección de estilo, cuento infantil y poesía. Actualmente se desempeña como actriz de Ditirambo Teatro y gestión cultural.
Redactora Circulo Literario Quira Medios
LITERATURA, UN OCÉANO INTERNO
Carolina Pedroza Ruiz*
Redactora Circulo Literario Quira Medios
videoscriptum@gmail.com
Marzo, 2017
La necesidad humana de manifestar pasiones, sentimientos y reflexiones ha evolucionado junto con las artes, creando y sofisticando variadas formas de expresividad. Las aflicciones del mundo externo e interno que enfrenta en su cotidianidad, hacen de las artes una sublime experiencia existencial.
En este sentido, la literatura brinda la posibilidad de sumergirse en las profundidades de los sentimientos e ideas a través del verso y la prosa otorgando a las vivencias humanas una belleza y afección que trasciende en tiempos, espacios e incluso barreras idiomáticas, gracias a que la palabra permite transmitir sensaciones y mensajes, acercando a las personas de diversos lugares del mundo sin importar razas, edades ni géneros.
En Quira Medios correspondemos a esa condición humana del culto a la palabra, y por ello propiciamos a través de los nuevos medios y tecnologías el encuentro con las nuevas y clásicas letras del mundo, brindan un aire fresco para todo aquel que está dispuesto a navegar a través de las artes descubriendo la voluptuosa sinusoidal profundidad del universo oceánico del espíritu humano.
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* Artista escénica bogotana, con estudios en Dirección y Producción de Cine y Televisión, especializada en escritura, redacción y corrección de estilo, cuento infantil y poesía. Actualmente se desempeña como actriz de Ditirambo Teatro y gestión cultural.