(d): Tome medidas inmediatas que los niños, niñas y adolescentes puedan tener alimentos en calidad y cantidad suficiente para satisfacer las necesidades alimentarias con pertenencia cultural, así como establecer los mecanismos idóneos para la identificación de casos de desnutrición para una intervención inmediata.  

(b): Concierte las medidas a adoptadas con los benefiarios y sus representantes. 

Sin embargo, en lo corrido de este año ya se han registrado 38 muertes de niños y niñas indígenas Wayuu en el departamento. A esto se suma la muerte de los niños y niñas que fallecieron  en las Rancherías de cada Clan y que no se reportaron ante la (SIVIGILA) - El Sistema de Salud Pública.

Esta situación cada día para nosotras, las mujeres indígenas Wayuu, es preocupante, las cifras de las instituciones no gubernamentales son alarmantes.  El INS (Instituto Nacional de Salud) durante este año de 2016, ya no reporta los casos de muerte por desnutrición o por enfermedades asociada por la desnutrición; el INS dejó de publicar las muertes por departamento; es decir, ahora en adelante se publican por país. Lo cual es gravísimo, pues limitan el acceso a tener conocimiento frente a ¿Cuántos muertos hemos tenidos en el departamento de la Guajira y en otros departamentos en los que habitan los pueblos indígenas en Colombia en relación con la desnutrición?  

Por lo anterior, el pueblo Wayuu se encuentra en condición de vulneración de sus derechos fundamentales; el agua vital para un ser humano, la crianza de sus animales para la nutrición, así como su soberanía alimentaria en agricultura y el derecho a la vida, se han vulberado por la minería más grande del mundo a cielo abierto – CERREJON, y el Sistema de Salud, hoy en crisis.

Este es uno de los miles de casos más recientes identificado por las mujeres indígenas Wayuu que hacen trabajo voluntario en la comunidad que evidencian la necesidad de una atención integral por parte del Gobierno Colombiano para salvaguardar la vida de las familias Wayuu.

Según nos informó la institución, el joven Gilberson Martin González, no aparece en su sistema de registrado y mucho menos en la FOSIGA. La Superintendencia también nos informó que el caso lo trasladaron a la Secretaria de Salud departamental – Riohacha. Intentamos comunicarnos con la Secretaria de Salud desde el viernes 26 de agosto,  pero ha sido imposible la comunicación. El joven hasta el momento no ha recibido la atención medica por parte de las instituciones competentes.

Por lo tanto, este joven no cuenta con su documento de identidad actualizado en el sistema. Pese a las condiciones inhumanas en las que se encuentra, no ha recibido ningún beneficio de algún programa del ICBF o de otras instituciones del gobierno Colombiano, tal como propone la CIDH mediante su resolución, especificamente en los apartados ( c ) y (d) anteriomente expuestos.